MARTHA FIGUEROA VENTANEA
A CONDUCTORES DE ‘VENTANEANDO’
Con el explosivo libro “Y me quedé corta’…
Por: Rocío Rangel
Foto: Javier Arellano
Revista Tvymás
Año 6 No. 327
30 de Octubre de 2007
Con su libro "Y me quedé corta", que dará a conocer el próximo año, Martha Figueroa
quiere que sus ex compañeros de Ventaneando se carcajeen junto con ella de las anécdotas que nunca reveló cuando formó parte
de este programa de espectáculos. Sin embargo, en esta misma publicación hablará de su gran batalla contra el sobrepeso e
incluirá también sus mejores columnas periodísticas.
“Quiero hacer un libro, espero que salga en la Semana Santa del próximo año.
Esta publicación ya la he reescrito cuatro veces. Voy a meter la mitad de mis mejores columnas del periódico y la otra mitad
son puras historias inéditas de mi lucha contra la báscula y de mi paso por Ventaneando, pues hay muchas cosas que nunca se
dijeron y que cuando las saque a la luz pública se van a carcajear, más que enojarse. Pati (Chapoy) formó parte de mi vida
tres años y por lo mismo tengo que hablar de ella.
“Más le vale que se ría. Yo creo que sí lo va a hacer porque tiene un gran sentido
del humor. No creo que haya demandas porque va a estar muy divertido. Más bien a alguien le meto un susto por ahí y no le
hará tanta gracia, pero no creo que llegue a demandarme. Voy a hablar de lo divertido que me la pasé, más no golpear a nadie
ni tampoco buscarme algún problema, pues solo voy a contra cosas que nunca se atrevieron a contarle al público”.
‘NETAS DIVINAS’ ES PARA ELLA COMO IR CON EL PSICOLOGO
Por otro lado, la periodista dijo que durante el año que lleva conviviendo con sus
compañeras Gloria Calzada, Yolanda Andrade e Isabel Lascurain en el programa Netas Divinas, nunca ha tenido algún problema
con ellas porque se han convertido en muy buenas amigas.
“De un año para acá ha sido delicioso trabajar con mis compañeras. Ya me puedo
morir tranquila porque ha sido muy padre estar aquí y ya lo que sigue es premio. Sí pensábamos que en algún momento nos teníamos
que agarrar de las greñas, pero no creo que suceda porque siento que ya nos agarraron cansadas, en el buen sentido de la palabra.
“Quiero pensar que es madurez y no vejez. Hacer este programa es como venir al loquero o
al psicólogo cada semana y encima nos pagan. Uno puede dar su opinión conforme le ha ido en la feria, eso es lo padre de esta
emisión, que te dejan hablar libremente y hasta con los codos”.